Excelentísimo Señor:

Con fecha de ayer a las once del día, dice el General en Jefe desde las Quechereguas al Capitán Prats, coman­dante de la avanzada, lo que sigue:

“Avance Vd. inmedia­tamente con los 200 hombres de su mando, y los 300 ca­ballos a las orillas del [río] Lontué; desde cuyo punto me dará aviso para comunicarle la orden que convenga. El ene­migo después del ataque del día 8 en que fue derrotado, se halla en fuga en la parte opuesta del río Claro, y se cree pase a marchas forzadas a su asilo de Chillán. Esta noticia comunicará a Vd. al Comandante don Santiago Carrera [5], para que con igual celeridad agite sus marchas hasta Lontué”.

En su consecuencia me avisa Prats desde Tinguiririca, fecha ayer tarde, que sin parar un instante caminaba de trasnochada con todo el grueso de caballos y mulas que le he ido remitiendo, cuyo número de los primeros asciende a 500 y más de 200 las segundas.

Hoy precisamente llega al centro el socorro deseado.

Yo inmediatamente hice avanzar la división, y en San Fernando alcanzará mi marcha, mayor copia de cabalgaduras, que espero con evidencia, según las medidas que he tomado. Todo se reúne favorablemente. Parece que no es difícil cortar a los piratas su vergonzosísima fuga, y que se acerca el momento glorioso del duradero triunfo de la patria.

Dios guarde a V.E. muchos años.— A mi partida de Rancagua, abril 11, a las ocho de la mañana.— Excelentísimo Señor.— Santiago Carrera.— Excelentísimo Supremo Director del Estado.

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[5]	Carreras, como aparece en otros documentos de la época (N. del E.) Volver