ACTAS DEL CABILDO DE SANTIAGO PERIODICOS EN TEXTO COMPLETO COLECCIONES DOCUMENTALES EN TEXTO COMPLETO INDICES DE ARCHIVOS COLECCIONES DOCUMENTALES

Diarios, Memorias y Relatos Testimoniales
Mariano Egaņa. Cartas a Juan Egaņa. 1824-1829
89. Londres, 20 de Abril de 1829.

LONDRES, 20 DE ABRIL DE 1829.

Amadísimo padre,

Escribo esta sólo para que no tenga Ud. cuidado, y para avisarle que estoy en preparativos de viaje. No me iré ya por la Malvina, porque demora mucho según lo veo al capitán, y no saldrá tal vez ni a mediados de junio. Además le tengo un poco de miedo, porque es muy pequeña, y por consiguiente no muy buena para el Cabo. Si en mayo no sale buque alguno para Valparaíso [desde] Liverpool o algún otro puerto de Inglaterra, me voy sin falta por el paquete aunque sea a costa de demorarme en Mendoza algún tiempo.

Por la Malvina despacho mi último resto de equipaje, y lo que en realidad debe llamarse mi equipaje, porque no pienso llevar conmigo más que un baúl y una maleta. Este último resto consta de dos baúles, cuatro cajas, un cajón de libros, dos barricas de loza, varios muebles de jardín como sillas, sofáes, etc., y un cochecito de un caballo, muy bonito, para que Dolores lo regale a mi nombre a su nueva hermana y sirva a ellas y a mi madre para los paseos al Tajamar o a la Cañada. Entre tanto es preciso guardar secreto, para no perder el gusto de la sorpresa cuando Dolores convide a Rosario a ir a dar un paseo por la Cañada la tarde siguiente al día de las bodas. Acá los viejos, en cuyo número no sé si querrá entrar mi madre, nos contentaremos con el grande, que me alegro haya parecido a Ud. tan bien. Es lo mejor que se hace en Europa, y es señor de tres mil pesos puesto en Valparaíso.

Es tanto el deseo que tengo de estar con Ud. que casi no puedo escribir una carta a Ud. porque me da una especie de flato, esto es, una irritación en los nervios o una sensación no dolorosa, sino de un placer mezclado con que sé yo qué, que no me deja quieto, porque me parece que estamos conversando, paseándonos por el jardín de Peñalolén, etc. A más de la suma sensibilidad de mi fibra excitada con las ideas de una pronta partida, creo que influye mucho la estación, y cuando escribo oficios al gobierno no me sucede esto.

Mi salud está buena; y entre tanto nos vemos, mi amado padre, soy su

Mariano.

Mil cosas a mi madre, Chabelita, Luisita, Juan y Ríos.