En noviembre de 1982 tuvieron lugar en Santiago las VII Jornadas Nacionales de Cultura, organizadas y coordinadas por la Facultad de Filosofía, Humanidades y Educación de la Universidad de Chile. El tema que se debatió en aquella oportunidad fue La Identidad Nacional.
Allí se señaló en qué medida el reconocimiento de su identidad como nación constituye un imperativo para todo chileno, por cuanto entre los rasgos característicos que lo definen como tal se confunden habitualmente elementos tradicionales con estímulos foráneos. Se enfatizó, asimismo, el hecho de que la identidad nacional no es algo que pueda lograrse de una vez para siempre y conservarse en lo sucesivo como un legado permanente, sino que ella puede ganarse o perderse en el curso de la historia patria o, simplemente, cambiar de expresión en conformidad con la mudanza de sus símbolos. Aquello que nos identifica como chilenos apareció señalado en dichas jornadas como una gran pregunta por las raíces y la savia de nuestro ser, invitando a ponerlas en manifiesto como un medio de asegurar la coherencia de nuestras decisiones históricas y, por consiguiente, de nuestro destino en cuanto nación.
Una tarea se impone como necesidad ineludible para contribuir a dar una respuesta adecuada a aquella pregunta; es la de hacer accesibles las obras que de una u otra manera han arrojado luz sobre el problema de nuestra identidad en cuanto chilenos, ya sea como descripciones del país o de su historia, ya como, testimonios de nuestras costumbres o de nuestros valores, y que por circunstancias de diversa índole no se hallan al alcance de los lectores no eruditos.
Tal es el propósito que persigue la colección Libros de Chile, cuya publicación se inicia con el presente volumen. Ella incluirá obras consideradas de importancia fundamental por su contenido y forma, escritas por autores chilenos y que concitaron la atención de los estudiosos de la época en que aparecieron; incluirá igualmente obras de autores extranjeros (cronistas, viajeros y ensayistas) que se refieren a Chile y que se caracterizan por su importancia, su claridad y su comprensión del país o de algún aspecto de él; comprenderá también, por último, obras inéditas de autores nacionales o extranjeros que, siendo de fundamental interés para la comprensión de nuestro país o de algún aspecto de la realidad nacional, nunca fueron impresas. La colección no intenta hacer labor filológica ni de crítica textual, sino sencillamente salvar del olvido ciertos documentos de interés primordial para la cultura de nuestro país y la tradición de sus valores fundamentales.
Es propósito de la Universidad de Chile que en el año 1992, cuando ella celebre sus 150 años de existencia, la colección Libros de Chile haya alcanzado una presencia que permita identificarla como portadora de un legado nacional en que nuestras tradiciones y valores encuentren su debida expresión; de este modo, cumplirá su objetivo de iluminar nuestra trayectoria en su marcha histórica hacia el futuro.
